Cómo elegir el armario adecuado para tu oficina

Las oficinas de hoy en día tienen necesidades cambiantes y diversas para el almacenamiento. Dependiendo de nuestro sector, del tamaño de la empresa e incluso de la distribución que utilicemos, cada negocio tiene unos requisitos distintos, tanto del espacio disponible como del tipo de material que necesitan guardar.

Los elementos más comunes son diferentes tipos de documentos y material de oficina, pero en muchos casos también tendremos consumibles de informática o sencillamente equipos de repuesto.

Los armarios de oficina son una solución versátil; ofrecen posibilidades para tener ordenado todo tipo de elementos además de diferentes alturas que nos permitan aprovechar espacios muertos de la oficina o sacarle el máximo partido con un gran volumen en poca superficie.

1) El tamaño del armario

Una de las primeras decisiones que tenemos que tomar para elegir un armario para nuestra oficina es decidir qué tamaño es el más adecuado para nosotros, tanto por la cantidad de material que queramos almacenar, como por el espacio del que disponemos.

Si nuestra oficina es amplia o tenemos pocos elementos en el espacio, una opción excelente es emplear armarios altos, tanto armarios metálicos altos como armarios de madera altos, ya que nos permitirán sacar el máximo provecho de la superficie que ocupan. Si necesitamos el amplio volumen de un armario alto pero nos preocupa que en un espacio reducido cree una sensación de una oficina más pequeña, un sencillo truco es optar por un armario de colores claros, en especial si la pared es de un color similar.

Los armarios medianos son un recurso adecuado para obtener un buen equilibrio entre capacidad y una sensación más ligera en la oficina. Los armarios medianos nos permiten dejar libre suficiente superficie de pared para crear una imagen más diáfana, además de poder emplear esa porción de pared para colocar decoración y darle un aire más personal al espacio.

Los armarios bajos nos ofrecen una opción interesante a la hora de aprovechar el espacio, ya que su altura entorno a los 75 cm, queda a nivel de una mesa de trabajo, lo que nos facilita tener un espacio de almacenamiento de fácil acceso para los trabajadores, convirtiendo nuestra oficina en un lugar más eficiente.

2) ¿Madera o metal?

En la elección del material para nuestros armarios van a contar cuestiones tanto estéticas como de las prestaciones que cada material nos ofrece. En el caso de los armarios de madera nos encontraremos la ventaja de la sensación más amable que nos da la madera, además de que suele ser más fácil de combinar con el resto de nuestros muebles. Por su parte los armarios metálicos nos dan la fiabilidad de su estructura, además de interesantes opciones de almacenamiento, en especial para documentos, valorando también una variedad de colores más atrevidos.

Los armarios de madera nos dan una imagen más orgánica y agradable, muy adecuada para todo tipo de oficinas, ya que además con diferentes opciones de acabados podemos cubrir todo tipo de negocios tanto si buscas una imagen seria y profesional, como un aspecto más abierto y creativo.

Los armarios metálicos nos recuerdan estéticamente a los archivadores clásicos de oficina construidos en chapa de metal. Es un material que permite acabados de colores más radicales, que nos pueden ayudar a darle un giro actual y diferente a nuestra oficina. Además en el apartado de utilidad podemos beneficiarnos de características tan interesantes como las baldas preparadas para carpetas colgantes en la parte inferior, una auténtica ventaja a la hora de convertir nuestro armario en un archivador, o dividirlo para almacenar documentos y material de oficina.

3) La configuración del armario

La versatilidad de los armarios de oficina para ofrecernos soluciones de almacenamiento se expresa en muchas ocasiones en la configuración del espacio interior. Podemos encontrar armarios con diferentes combinaciones de puertas, cajones y espacios de baldas abiertos.

La opción de armarios con cajones-archivador, es muy interesante para quienes tienen necesidades exigentes a la hora de guardar documentación y ficheros. Los cajones-archivador con cerradura individual son interesantes si queremos compartimentar la información, de forma que podemos tener un cajón individualizado para cada trabajador o equipo de trabajo. Los archivadores de oficina son una alternativa para la clasificación de documentos, más específica que nos ofrece un gran volumen de almacenamiento en un formato más estrecho.

Otra característica muy útil son las puertas correderas cuando necesitamos ahorrar espacio; al no necesitar el espacio del ángulo de apertura de la puerta, podemos instalarlo en espacios más reducidos y seguir teniendo un acceso completo al interior.

Para más trucos a la hora de configurar al espacio de tu oficina, en especial en aquellas pequeñas, puedes visitar el artículo de nuestro blog  8 consejos para amueblar oficinas pequeñas.